MALOS Y MALVADOS PARTE II: José que se nos volvió religiosa y apostólica no mas.

Y mira que el asunto de las medallas ha traído cola, pero la última corriente de opinión del grupo socialista abanderado por la Sra Alcaldesa, señala que no hemos aceptado las medallas como una falta de respeto al santo:

Palabras textuales: "claro que es un desaire a San José...la medalla se la pone uno como reconocimiento al lugar a donde se va, y poniendo bajo la advocación religiosa el poder civil que nos ha dado las urnas. Se desaira al santo usando vestimenta inadecuada, como AIS en los años anteriores, o negándose a ostentar los símbolos de los que somos. Tardamos cuatro años en enseñarles a vestir adecuadamente, tardaremos otros cuatro en enseñarles como hay que representar dignamente la condición de concejales...Por cierto, la concejala lleva un collar que seguro cuesta tanto como la medalla...cada cual lleva lo que considera..."

¡¡JOSÉ QUE LA CHICA SE NOS VOLVIÓ RELIGIOSA!! VAYA POR DIOS...

PRIMER PUNTO: Resulta que ahora los concejales no aceptamos la medalla insigne, y dice en resumidas cuentas que le hacemos un desaire al Santo.

La que se define como agnóstica, la que dijo tantas veces no ser creyente de ninguna religión, y que ahora dice que no aceptar la medalla supone una falta de respeto a San José...Cuanta hipocresía, en palabras de Moliere (comediógrafo francés) la hipocresía es el colmo de todas las maldades.

SEGUNDO PUNTO: Las estrategias del presente: La simulación y el disimulo.

La hipocresía consta de dos operaciones, a través de las cuales se manifiesta en los modos simple y combinado: la simulación y el disimulo. La simulación consiste en mostrar lo que se desea, en tanto que el disimulo oculta lo que no se quiere mostrar.

Nuestro respeto y devoción a San José ha sido y será siempre con el mayor de nuestro amor y valor a su vida, a su carácter como patrono, y a su apelativo que da nombre al barrio y a la zona, pero no podemos salir de nuestro asombro cuando, se nos dice que el no aceptar las medallas, supone faltar el respeto al santo.

No es que no aceptemos las medallas, es que no es el momento, es el momento de ayudar a las personas, de estar con ellas, de ayudar, de trabajar para siempre estar a su lado, y desarrollar servicios que mejoren la calidad de vida, no de comprar medallas, ni de celebraciones que nos ensalcen como representantes municipales, ¡¡¡NO!!!, no es momento de eso...

Y faltar el respeto al santo (DEMAGOGIA), sabe que la gente, que el municipio no ve prioritarias las medallas ahora, y eso no tiene nada que ver con San José, porque como bien dice la religión cristiana, la fe va en uno mismo, en las pequeñas cosas, en la cotidianidad...tener fe en alguien o en algo...supone fiarse de esa persona, y por tanto confiar y ser fiel, y como usted no cree, ¿como ser fiel a algo que no se cree?

"El que está convencido de que tiene que hacer una cosa, la hace. Y si no la hace, es que no existe la convicción". 

POR TANTO SI USTED NO CREE EN LO RELIGIOSO, ES BOCHORNOSO QUE UTILICE ESTOS ARGUMENTOS PARA JUSTIFICAR EL GASTO EN SUS FIESTAS Y SARAOS.

DEJE DE MENTIR y DE UTILIZAR LOS SENTIMIENTOS DE LAS PERSONAS, Benditas las personas que creen y sienten lo que dicen, sobre todo aquellas que lo manifiestan con hechos, que cuidan de nuestra comunidad religiosa, muchas veces en silencio, benditas las personas que tienen convencimiento y convicción, frente a aquellas que lo utilizan de manera arbitraria y sin amor a nada, solo por odio y rencor, y para sus intereses políticos.